Punto de encuentro

Sonrió como un tarado enamorado cuando le escuchó antes de ese beso que después se convirtió en uno más largo, abrazándole por la cintura como si sintiera que se fuera a escapar de sus brazos y él se lo impediese, siguiéndole el beso. Extrañaba ya poder estar así con ella a pesar que sólo había pasado un día que para él se convirtió en una eternidad sin poder besarle, acariciarle y ver, sentir cada parte que le gusta de ella -

(Agarró su cuerpo como si alguien se lo fuese a sacar, como si aquello fuese una despedida que gracias a Dios no lo era y se habían prometido que no lo iba a ser por mucho tiempo. Se separó pero sin poder evitar darle unos picos continuos) Te amo tanto mi amor, te amo.. (sonó sincera, porque lo era, porque pocas cosas se decían con el corazón y esa era sin ninguna duda una de ellas)

Correspondió a cada piquito hasta que se detuvo para poder hablar, mirándole a los ojos y sintiéndose perdido por esa dos palabras que cuando la escuchaba salir de ella provocaban que mantuviera esta relación por mucho más tiempo de lo que siempre quiso tener. Juntó su frente con la de ella, cerrando los ojos, abriéndolos al instante y con una gran sonrisa - Yo también te amo más de lo que te imaginás; no sé como hacés para que cada día crezca todo esto que siento por vos, rubia - Dándole un pico al final y separándose un poco de ella - Ahora necesito cumplir una cosita que le prometí a una persona muy especial, quiero recuperar todo el tiempo que perdí al no estar con ella

(Después de esos besos tiernos, de sus palabras que le hacían cada día estar más enamorada y entender que posiblemente ese era el amor de su vida, ni anteriores ni futuros. Recordó cada uno de los momentos vividos con él, algunos más en especial que otros y se separó lo justo para hablar más cómodamente, sin soltar su cuello, pasó las piernas por encima de las de él, divertida) ¿Y ya se te ocurrió algo? ¿Alguna de esas fantásticas ideas?

Movió a un costado la boca un tanto divertido, haciendo que pensaba, terminando por mirarle con esa sonrisa que ya de costumbre saca cada vez que está a su lado - Podríamos ir a un lugar que se que te gustará mucho, es un lugar muy especial, fue el que hizo que éste amor diera sus primeros pasos y gracias a eso sin dejar atrás a una personita que fue la que 'preparó' todo, estamos como ahora - Posando las manos en su cintura con una mirada muy tierna -

(Le escuchó perdiéndose en su sonrisa, desde siempre se había fijado en los ojos y la boca como primera cosa, y él hacía que no pudiese dejar de mirar esas facciones perfectas que tenía. Sonrió al escuchar donde quería llevarle) Ese es uno de mis lugares favoritos en el mundo, armaría allá una casa y pasaríamos el día allá, solos.. (se acercó para darle un besito corto y dulce) Esa personita es un capo, creo que podría decirse que es un amor, mi amor, mi gran amor.. (susurró las últimas tres palabras, no por miedo, si no para remarcarlas)

- Eso de la casa tampoco es muy mala idea, eh.. pero sabiendo que eso de armar una casa como tal es un poco difícil y tomaría su tiempo, por ahora lo mínimo que podríamos lograr a armar ahora lo que sería una carpa, para poder al menos estar más cómodos - Encogió de hombros, mirando a los lados y luego a ella cuando le escuchó - Sí, tiene un gran facha y a pesar de tener a todas las minas loquitas solamente tiene ojos para una sola, que es el amor de su vida, que también hay que admitir que es muy hermosa - Dijo divertido, dándole un sonoro beso en la mejilla -

¿Y de dónde querés sacar una carpa vos, mente pensante? (rió al escucharle, divertida y contagiosa como siempre hacía) Pero para mí que nadie conoce el lugar, así que sin carpa ni nada, podemos estar solos y cómodos, ¿no? (se encogió de hombros, sonriendo. Escuchó su autodescripción con una gran risa, sobretodo al llegar a una parte) ¿El amor de su vida es esa mina? Entonces me parece que tiene suerte de tener semejante minón para él solo, te digo.. (rió divertida, ante su beso, mordiéndole suavemente el cachete)

Encogió de hombros dándole una miradita a su alrededor, inspeccionando cada parte del lugar, pensativo, volviendo a escucharle para poder verle - Sí, es cierto, pero quiero que tengas toda la comodidad posible además con tan solo poner algunas cositas allí no se vería tan mal ¿no crees? Igual debe de haber cosas guardadas por ahí, a lo mejor hasta encontremos la carpa - Alzando la cejas continuamente y con una sonrisa traviesa. Cerró los ojos al sentir esa mordida, arrugando la nariz y asintiendo con la cabeza, siguiendo con el juego - La verdad que sí, ni te imaginás lo que és, cualquier chico se moriría por estar con una mina como ella

Voy a terminar creyendo que soy una princesa en su palacio hecho de hojas de palmera y cocos.. (rió divertida por la situación, sonriendo después) No perdemos nada por intentarlo, ¿no? (rió al ver su cara, sin poder evitar reír con él, escuchó lo que decía ahora de ella, sonriendo mientras se mordía el labio) Pero sabés lo que pasa, aunque todos mueran por ella, a ella le pasa lo mismo que a él, solo tiene ojos para un morocho divino que le hace sentirse increíble.. ¿No te gustaría tener una historia como la suya? Perfecta, de novela casi..

Rió con ella, contagiado, por lo gracioso que llegó a sonar eso que acaba de decir, mordiéndose el labio al parar - Ya sos una princesa, pero, para terminar de serlo tenés que tener un príncipe ¿no crees? Es que así dicen en los cuentos - Guiñándole el ojo, sonando como si fuese obvio a lo que se refería, riendo una vez más - Bué entonces vayamos buscando algo ¿no? Mirá que el camino hacia nuestro lugar es re largo... - Dándole un besos corto sin poder aguantar un minuto más sin poder probar sus labios. Ladeó la cabeza posando un dedito en la boca mientras pensaba cada cosa que acababa de decirle - Me encantaría, de todos modos, le preguntaré si su novia no tiene una amiga la cual pueda presentarme, mirá que no es el único con una gran facha

Pero, ¿ese príncipe no se va a convertir en rana nunca, verdad? (preguntando como a una nena a la que le cuentan un cuento antes de dormir, rió seguido antes de perderse de nuevo en sus labios) Dale, vamos yendo, me muero por volver a mi palacio personal.. (rió separándose un poco de él, parándose de la mesa al escucharle) La verdad me parece una muy buena idea, yo puedo preguntarle al pibe si tiene un amigo rubio para que me presente, ¿no te dije que a mí me iban los rubios? (intentó sonar jodona pero por si acaso no lo conseguía se colocó detrás de él, pasando los brazos por su cuello y besándole)

- Habia salido a caminar ese dia desde por la mañana me habia perdido todo el dia cuando llegue cojida de brazos de uno de los de alli ya que me habia exo daño en el tobillo, buscando pistas sobre mi hermana-

off:(A)

Le miró extrañado al notar esa reacción, actuando como una nena, negó con la cabeza rodando un poco los ojos y seguido de una risa - Dudo mucho que pueda convertirse en rana, si tiene a la princesa siempre a su lado, jamás lo hará - Dijo costándole un poco sonar serio si estaba tan tentado por cada cosa que se les ocurrían. Esperó a que ella se levantara para seguirle hasta que le escuchó molestándose con tan sólo escuchar esa palabra que estaba empezando a detestar si la oía de ella, igual, no pudo recriminarle en nada al sentir su beso que tanto le podía olvidándose de todo; se separó un poco, echando la cabeza hacia atrás para así mirarle - Yo creo que te van mejor los morochos, son más caños que los rubios, mirá que la mayoría pueden ser hasta teñidos... al menos que quieras que yo haga algo así - Encogió de hombros, bromeando en la última frase, vió como llegaba Cande y se quedó un tanto extrañado por como entró - Flaqui ¿qué te pasó? - Notando que le dejaban sentada cerca de ellos y dirigiendo la mirada a su tobillo que parecía lastimado -

- Note como me dejaban al lado de victorio y euge, justo de ellos? los mire y me quite rapido cualquier imagen de la cabeza- Me..me lastime el tobillo,llevo todo el dia fuera pero claro si nadie sabe ni que existo -suspire y sonrei al chico- gracias gordo cuando peudas venis a por las galletas-dandole un beso en la mejilla,viendo como se iva y levantandome para irme-

(Escuchó las cosas que se tiraban uno al otro, riendo por cada ocurriencia, no podía negar que él le hacía olvidarse de todo. Se separó después del beso de 'reconciliación' para escucharle, volviendo a reír y negando convencida con la cabeza) Nada de rubios teñidos, me gustan mucho más los morochos que son sinceros hasta en eso.. Además, la rubia de la relación soy solo yo (sonrió canchera, estaba por volver a besarle cuando la vio entrar a Candela, suspiró para sus adentros, incorporándose detrás de Victorio, sin soltar las manos de su cuello. Sonrió como pudo, le había prometido que nada de celos y lo iba a cumplir, si podía) ¿Estás bien? ¿Qué pasó?

- escuche a euge y la mire- nada, me tropeze que fui a buscar unas ayudas y me hize daño en el tobillo

Rió por aquel último comentario de Euge, era imposible no enojarse con ella, de alguna u otra forma siempre lograba zafarse. Volvió la mirada hacia Cande mientras escuchaba su relato, haciendo una pequeña muequita al final cuando ésta se despidió del chico que le trajo en brazos; suspiró, fijando una vez más la mirada a el tobillo lastimado y luego a su novia, que por suerte, reaccionó de una manera muy distinta a las otras - Si querés te ayudamos, no da que estés con el tobillo así y menos acá que no hay nadie 'especializado' para ayudarte, es más... ahora iba a buscar unas cosas si querés veo y te traigo algunos vendajes - Haciendo gestos con las manos mientras tomaba la palabra, sonriendo un poco y levantándose de donde estaba, dándose la vuelta a la rubia - ¿No te importa quedarte un minuto con ella, no? - Preguntó en un susurro alzando la ceja esperando que su respuesta fuera la correcta -

- les mire mientras los escuchaba- no no hace falta enserio, no quise molestar ni mucho menos, zac deve de estar por venir lo llame por el walkie y esta aca en nada,gracias igual

(Escuchó toda la historia de Candela sin poder evitar pensar que todo estaab montado para quedarse con Victorio, pero justo estaba ella en el momento adecuado, ¡una capa! Estaab sumida en sus pensamientos cuando lo escuchó a Vico, se encogió de hombros hablando en un tono desinteresado) Obvio amor, andá que me quedó acá con ella, está todo bien.. (se separó de él para sentarse al lado de Cande, mirándole) Hasta que vuelvas vos, o hasta que venga Zac

Giró la cabeza hacia Candela para poder mirarle cuando volvió a escucharle que hablaba una vez más de Zac, frunció el ceño y negó con la cabeza - Dejálo, digo, que seguro debe de estar entrenido con los amiguitos de su grupo y se tardará. No podés estar todo el rato con el tobillo así, por lo menos dejá que te ayudemos.. - Sonrió de ladito intentando ocultar lo molesto que estaba ya con tan solo volver a escuchar ese nombre ¿celoso? Jamás, pero simplemente, había algo que no le gustaba ahí. Escuchó a Euge y sonrió más tranquilo, depositando un beso en su mejilla - Ya vuelvo - Caminó hasta la puerta y salió a ver si por lo menos lograba conseguir algo, además, de las cosas que había planeado minutos atrás con la rubia -

- Me quede alli con euge mientras me miraba el tobillo, sin hacer mucho caso a nada-

(Escuchó a Victorio, sonriendo al ver como se marchaba. Miró a Candela y se levantó para agarrar un poco de hielo, envuelto en un trapo) Tomá, por ahí te sirve de algo mientras vienen los chicos

- la mire y sonrei mientras me puse el hielo en el pie- Gracias, al menos se me calmara un poco el dolor

Llegó al punto de encuentro, se había topado con Zan y lo había mandado para allá sin más explicación. ¿Y por qué tenia que hacerle el caso? Ni él lo sabia, pero igual no tenia nada más interesante que hacer y fué. Al llegar vió a Euge con Cande, las miró algo perdido.
- ¿Que pasó acá? ¿hicieron reunión y me tuve que enterar por el flaquito? - (sin avivarse siquiera del pié de Cande)